Desde la representación gráfica al movimiento real, la obra de Roberto Martínez se centra en una relación con lo urbano, lo cotidiano, lo matérico… Cómo hablar de su trabajo sin detenernos en el que quizás es uno de los tópicos fundamentales en su obra, la bicicleta. Amiga, compañera, musa, la bicicleta es uno de los elementos mejor y con mayor frecuencia plasmados en su obra gráfica. En «Del Pedal a la Fibra» sin embargo, nos vemos ante otro tipo de relación con éste objeto, un vínculo si se quiere, más conceptual. En esta muestra más que relaciones evidentes y representaciones claras, Roberto nos lleva a través de un recorrido diagonal en el que el movimiento y la experiencia cobran un nuevo sentido. En este nuevo transitar nos encontramos ante una obra gráfica tridimensional, abstracta, interactiva, un tipo de recorrido más simbólico, pero al mismo tiempo, más directo en la medida en que impele al espectador a que interactúe con las obras, a la vez que le recuerda el movimiento ya realizado, en el fondo una doble invitación, a transitar y recordar lo transitado, pero ¿Transitar hacia dónde? Y es aquí donde surge la fibra, elemento constitutivo de las obras, materia prima vegetal, madera y papel, que es soporte de sus impresiones, cuerpo de instalaciones y matriz de sus grabados.
Paula Cabrera / Egresada en Teoría e Historia del Arte Universidad de Chile